Consecuencias de los trastornos de la ATM (articulación temporomandibular)
Los problemas de la articulación temporomandibular pueden causar fuertes dolores y afectar a la vida de quien los padece. Te decimos cómo puedes evitarlos
La salud bucodental no solo afecta a la boca, sino que puede tener consecuencias para el resto del organismo.
Nuestro cuerpo no funciona individualmente por partes, al contrario, trabaja como un todo y es posible que tener una afección conlleve desencadenantes para la salud general.
En este artículo vamos a centrarnos en la articulación temporomandibular, también llamada ATM.
Las patologías en esta articulación producen problemas que pueden afectarnos en el día a día, por lo que es importante saber detectarlas a tiempo para ponerle remedio.
Índice de contenidos
¿Qué es la articulación temporomandibular?
Una articulación es la unión de dos huesos de modo que una de ellas tenga libertad de movimiento.
Los seres humanos tenemos dos ATM, uno a cada lado de la cara, y se encarga de conectar la mandíbula con el cráneo.
Gracias a esta articulación, podemos mover y abrir la boca con normalidad.
Normalmente, una persona es capaz de abrir la cavidad oral una distancia que va entre los 40 y los 50 centímetros.
Para comprobar que, efectivamente, la articulación temporomandibular no padece ninguna complicación, podemos hacer la prueba de los tres dedos.
Consiste en introducir de forma vertical tres dedos entre los incisivos superiores centrales (paletas) y los inferiores.
Trastornos de la ATM
Hablamos de trastornos de la ATM y de los músculos temporomandibulares cuando esta articulación no funciona debidamente y causa molestias.
Según un estudio llevado a cabo por el Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana, las disfunciones de la ATM afectan al 80% de la población mundial en personas con un edad media de 34 años.
El informe precisa que las mujeres presentan esta patología con más asiduidad que los hombres, sobre todo aquellas con edades comprendidas entre los 25 y los 35 años.
Además, después del dolor de dientes, los trastornos de la ATM son la segunda causa más común de la aflicción facial.
¿Qué factores propician los problemas en la ATM?
Las causas que favorecen la aparición de patologías relacionadas con la ATM no son fáciles de determinar y para la persona, las molestias aparecen sin ninguna razón aparente.
El dolor que provoca el trastorno de la articulación temporomandibular suele ser pasajero en muchos casos.
Esto sucede si la persona tiende a tensionar o apretar la mandíbula en exceso, en muchos casos hábito provocado por el estrés.
Sin embargo, no todos los pacientes con bruxismo llegan a desarrollar este tipo de trastornos
Igualmente, un traumatismo provocado por un golpe muy fuerte puede afectar al correcto movimiento de la articulación.
Otra razón que puede causar dolor transitorio en la ATM es habernos sometido a una cirugía en la que hayamos mantenido la boca abierta durante mucho tiempo.
Una categorización para los trastornos de la articulación
De acuerdo con un informe publicado por el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial de Estados Unidos, los problemas de la ATM pueden dividirse en tres categorías principales:
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Dolor miofascial: implica molestias o dolor en los músculos que controlan la función de la mandíbula.
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Desarreglo interno de la articulación: se relaciona a un disco desplazado, a una dislocación de la mandíbula o a una lesión del cóndilo.
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Este último elemento es el que articula bilateralmente con la base del cráneo.
Por su parte, el objetivo del disco es amortiguar los movimientos del resto de piezas articulares.
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Artritis: se refiere a un grupo de trastornos degenerativos o inflamatorios de las articulaciones que puede afectar a la ATM.
Precisamente, las personas con artritis reumatoide (AR) tienen más problemas con la ATM en comparación con pacientes sanos.
Así lo demuestra un ensayo clínico publicado en la Revista Española de Cirugía Oral y Maxilofacial.
En el grupo de personas con AR se encontró una afección de la ATM en el 75% de los pacientes, mientras que en el grupo de pacientes sanos solo en el 13,5%.
Síntomas para detectar los trastornos de la ATM
Aunque el principal indicio de que la articulación temporomandibular tiene algún problema es el dolor en los músculos y huesos de la mandíbula, hay otras señales que nos pueden alertar.
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Dolor de cuello, oídos y dientes.
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Rigidez en los músculos de la cara.
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Dificultad y dolor al abrir o mover la boca (trismus dental).
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Chasquido articular.
El 80% de la población mundial padece algún trastorno de la ATM y afecta mayormente a mujeres
¿Qué consecuencias tiene?
Como hemos explicado, una persona con trastornos de la articulación temporomandibular sentirá una aflicción persistente en la zona mandibular.
No obstante, en su día a día puede encontrarse con una serie de inconvenientes que le impedirá llevar una vida normal en los casos más graves.
Deglución
Al no ser capaz de abrir la boca de forma natural, la persona encontrará limitaciones a la hora de comer.
Además, el proceso de masticado se dificulta sustancialmente pues la mandíbula no tiene la libertad habitual para moverse.
Higiene bucodental
Al igual que sucede con la alimentación, el paciente tendrá dificultades para cepillarse los dientes y, por tanto, para llevar una rutina de limpieza dental adecuada.
Es posible que ni siquiera llegue a ver las piezas posteriores, por lo que el hilo dental no será tampoco efectivo.
Función del habla
Las personas con trastornos de la ATM experimentan ciertas alteraciones a la hora de realizar movimientos mandibulares para hablar.
Con el objetivo de analizar qué síntomas relacionados con esta patología son los que más impiden la función del habla, la Universidad de São Paulo (Brasil), realizó un estudio con pacientes.
Si tienes un trastorno de la ATM cuida los movimientos de la mandíbula y evita comer alimentos duros.
El informe concluye afirmando que el dolor, el ruido de las articulaciones y la dificultad para pronunciar correctamente los fonemas fueron los inconvenientes que más incidencia tuvieron para los individuos.
La principal alteración provocada por el trastorno de la ATM durante la ejecución del habla son las desviaciones laterales de la mandíbula.
Tratamientos para la disfunción de la ATM
Aunque la causa del trastorno de la articulación temporomandibular no siempre está clara, es importante acudir a una clínica dental para que un profesional odontólogo examine cada caso.
De este modo, podrá descartar otras patologías que tengan síntomas similares y aplicar un tratamiento adecuado.
Si se determina que el origen se encuentra debido al bruxismo, el dentista podrá recomendar el uso de una férula de descarga que ayude relajar la mandíbula.
Igualmente, la ingesta de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios contribuirán a aliviar el dolor y tensión de la boca y cuello.
Consejos para mitigar sus efectos
Modificar los hábitos puede ser un método sencillo y eficaz para que el dolor y las molestias derivadas del trastorno de la ATM no afecte a la rutina diaria.
Aquí puedes encontrar algunos consejos que te ayudarán a calmar la dolencia.
Alimentos
Existen ciertos alimentos que debes evitar si padeces trastorno de la ATM.
Aquellos que requieren un gran esfuerzo para masticar intensificarán el dolor en la zona.
Sobre todo, nos referimos a chicles, caramelos blandos tipo toffee, frutos secos excesivamente duros como los kikos o las pipas.
Igualmente, es aconsejable tener cuidado con los movimientos, por tanto, no comer bocadillos o hamburguesas que obligan a la persona a abrir y forzar demasiado la boca.
Aplica calor
Aunque el trastorno de la ATM tiene su origen en la mandíbula, incide directamente sobre los músculos de la zona.
Por ello es recomendable aplicar calor en la zona dolorida para contribuir a la relajación muscular.
En situaciones de crisis aguda, es recomendable acudir a un fisioterapeuta especializado en ATM.
Reducir los niveles de estrés
El estrés afecta directamente a la salud de nuestros dientes, no solo por la aparición del bruxismo sino también del trastorno en la ATM.
Por eso, es aconsejable que los pacientes con esta patología realicen ejercicios de relajación para gestionar el estrés de forma más eficaz.
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Grau León, K. Fernández Lima, G. González, M. Osorio Núñez., (2005) Algunas consideraciones sobre los trastornos temporomandibulares. Rev Cubana Estomatol 2005; 42(3). (http://scielo.sld.cu/pdf/est/v42n3/est05305.pdf)I
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Guadalupe Ibáñez-Mancera, I. Vinitzky-Brener, S. Muñoz-López, F. Irazoque-Palazuelos, C. Arvizu-Estefania, T. Amper-Polaka., (2017). Disfunción de la articulación temporomandibular en pacientes con artritis reumatoide. Volume 39, Issue 2, April–June 2017, Pages 85-90 (https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1130055816300338)
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