Clínica de estética dental en Madrid: tratamientos, beneficios y duración

Existen dos tipos fundamentales de carillas: las de porcelana y las de composite.

Dentro de las carillas de porcelana, las marcas más conocidas son dos: e.max y Lumineers. Ambas se caracterizan por ser especialmente estéticas, resistentes y duraderas, ya que pueden durar en buen estado aproximadamente unos quince años.

Por su parte, las carillas de composite no ofrecen tanta estética, resistencia y duración a largo plazo, ya que tienen una vida media estimada de unos cinco años. Sin embargo, cuentan con la ventaja de ser mucho más baratas que las de porcelana.

Aunque para muchas personas puedan parecer tratamientos similares, lo cierto es que las carillas y las fundas cumplen funciones diferentes y están indicadas para distintos tipos de casos. A continuación, vamos a detallar sus principales diferencias.

En primer lugar, se diferencian por el área que cubren. Mientras que la carilla solamente cubre la cara visible del diente, la corona tapa toda la superficie.

En segundo lugar, su objetivo final es diferente. Es decir, la carilla tiene una finalidad exclusivamente estética. Sin embargo, la funda se coloca tras la pérdida de un diente o para proteger una pieza dental cuya estructura está dañada. Por ejemplo, puede ser que el diente se haya roto o esté desgastado.

En tercer lugar, se colocan en distintos tipos de dientes. Mientras las carillas solamente se utilizan para las piezas dentales más visibles, las coronas se pueden colocar sobre cualquier diente.

Si. Los tres tratamientos pueden ser combinados. Sin embargo, es necesario tener en cuenta una serie de particularidades.

En primer lugar, debes saber que ni las carillas ni las coronas dentales se pueden blanquear. Por tanto, el blanqueamiento siempre deberá llevarse a cabo antes que la colocación de carillas o fundas. De esta forma, conseguimos el color deseado en los dientes naturales y, posteriormente, fabricamos la carilla o la corona de la misma tonalidad (la que se ha obtenido tras el blanqueamiento).

En segundo lugar, no se puede colocar una carilla y una corona en el mismo diente. Dado que entre ellas son diferentes y que cumplen funciones distintas, el profesional se decantará por una u otra opción.

No. El tratamiento de blanqueamiento solamente puede actuar en los dientes naturales. Por tanto, no se pueden blanquear ni carillas ni coronas.

Si no estás satisfecho con el color de una carilla o una corona, la única solución es cambiarla por otra que se fabrique con la tonalidad que deseas.

Las diferencias entre una funda de zirconio y otra fabricada con un material distinto, como, por ejemplo, metal-porcelana, son dos fundamentalmente: la estética y el precio.

Las coronas de zirconio son mucho más naturales y discretas que las de metal-porcelana ya que, con el paso de los años, el elemento metálico comienza a ser visible en el borde del diente, lo que resulta muy antiestético. Esto hace que también sean más caras.

Por este motivo, en nuestra clínica dental utilizamos las coronas de zirconio en los dientes del sector anterior, por ser los más visibles. También realizamos la colocación de fundas de metal-porcelana. Sin embargo, las usamos para los dientes del sector posterior, los que no se ven al sonreír.